La trufa negra es uno de los ingredientes más valorados en la gastronomía mundial y la región de Aragón es famosa por su producción de trufa negra de alta calidad. Pero no solo eso, esta región también cuenta con varias denominaciones de origen vinícolas, que ofrecen una amplia variedad de vinos que pueden maridar perfectamente con la trufa negra. En este blog, hablaremos sobre los diferentes vinos con denominación de origen de Aragón y cómo se pueden combinar con la trufa negra de Aragón.
Trufa negra de Aragón y vino con D.O. del Somontano
Empezamos por la denominación de origen Somontano, ubicada en la provincia de Huesca. Esta zona vitivinícola es conocida por producir vinos blancos y tintos de alta calidad. Los vinos blancos de Somontano son frescos, afrutados y con una acidez equilibrada, lo que los hace una excelente opción para maridar con platos de trufa negra más ligeros como ensaladas o pastas. Los vinos tintos de Somontano son intensos y con cuerpo, con notas de frutas maduras y especias. Son una buena opción para maridar con platos más contundentes de trufa negra, como carnes rojas o guisos.
Hay algunos vinos que destacan en la combinación con la trufa negra. Uno de ellos es el vino tinto “Enate Reserva Especial”, un vino elaborado con uvas Cabernet Sauvignon, Merlot y Syrah. Este vino tiene un gran potencial de guarda, lo que lo hace ideal para maridar con platos de trufa negra, como un risotto o una pasta fresca.
Otro vino del Somontano que se recomienda para acompañar la trufa negra es el tinto “Viñas del Vero Secastilla”, elaborado con uvas Garnacha y Parraleta. Este vino es de cuerpo medio y tiene notas de frutos rojos y especias que complementan muy bien los sabores terrosos de la trufa negra.
Aunque no es común maridar los vinos rosados con la trufa negra, “Lágrimas de Obergo”, es un rosado de Bodegas de Obergo, con un toque a flores y mineral que recuerda a la frambuesa que puede marinar muy bien con la trufa negra.
Trufa negra y vino con D.O. de Calatayud
Otra denominación de origen de Aragón es Calatayud, ubicada en la provincia de Zaragoza. Los vinos de Calatayud son principalmente tintos, producidos a partir de la uva Garnacha, aunque también se producen algunos vinos blancos y rosados. Los vinos tintos de Calatayud son de cuerpo medio a completo, con una acidez equilibrada y notas de frutas rojas y especias. Son una buena opción para maridar con platos de trufa negra más intensos, como carnes rojas o guisos de caza.
Los vinos tintos de la Denominación de Origen Calatayud son muy conocidos por su carácter frutal y suavidad en boca. Algunos de los vinos tintos que pueden maridar bien con la trufa negra son los elaborados con las variedades de uva Garnacha y Syrah, que suelen tener notas especiadas y tostadas que complementan muy bien el sabor terroso de la trufa.
En la Denominación de Origen Calatayud, destaca el vino tinto “Bodegas Breca Garnacha Viejas”, un vino con mucho cuerpo y un sabor intenso y concentrado que se equilibra perfectamente con los sabores complejos de la trufa negra. Este vino es elaborado con uvas Garnacha de viñas viejas, lo que le da una personalidad única y un gran potencial de guarda.
Otro vino tinto con D.O. Calatayud que marida muy bien es el vino “Roque Colás”, producido por Colás Viticultores, en Alhama de Aragón. Producido con Tempranillo, Cabernet Sauvignon y Garnacha tiene aromas minerales, balsámicos, torrefactos y especiados y con sabor a fruta intensa que aflora al oxigenarse, lo que lo hace perfecto para maridar con platos con carnes rojas, chocolate y quesos con trufa negra.
Aunque en la Denominación de Origen Calatayud se producen principalmente vinos tintos, también se pueden encontrar algunos vinos blancos interesantes que pueden maridar bien con la trufa negra. Un ejemplo es el vino blanco elaborado con la variedad de uva Macabeo, que suele tener notas frutales y florales que combinan muy bien con el sabor intenso de la trufa negra fresca.
El vino blanco actúa como un complemento perfecto para la trufa negra, suavizando su sabor terroso y destacando sus notas más sutiles y delicadas. Además, los vinos blancos secos tienen una acidez que ayuda a cortar la grasa de los platos más ricos y cremosos que suelen acompañar a la trufa negra.
Trufa negra y vino con D.O. de Campo de Borja
El Campo de Borja es otra denominación de origen vinícola de Aragón, ubicada en la misma provincia que Calatayud, Zaragoza. Esta zona es conocida por producir vinos tintos a partir de la uva Garnacha, que se caracterizan por su cuerpo completo y su sabor frutal intenso.
Por su parte, la Denominación de Origen Campo de Borja cuenta con el vino tinto “Borsao Tres Picos”, uno de los vinos más reconocidos de la región. Este vino está elaborado con uvas Garnacha de viñas viejas y tiene un sabor intenso y afrutado que se complementa muy bien con los sabores terrosos de la trufa negra.
“Alto Moncayo” es otro de los vinos de Campo de Borja, vino tinto mono-varietal de Garnacha, procedente de viñas de entre 40 y 70 años, que posee una notable complejidad en nariz, con aromas de fruta negra, balsámicos y tostados y lo hace perfecto para el maridaje.
Aunque la trufa negra suele maridar más con vinos tintos, también podemos encontrar algunos blancos que pueden ir muy bien. En la D.O. Campo de Borja, destacan los vinos blancos elaborados con la variedad Macabeo, que suelen tener notas frescas y florales. Un ejemplo de ello es el “Bodegas Borsao Blanco Selección”, un vino con notas de pera, manzana y flores blancas que puede marinar muy bien para platos ligeros con trufa como ensaladas o carpaccios.
Los vinos rosados no son los más habituales para maridar con trufa negra, pero algunos pueden ser una buena opción si quieres probar algo diferente. Los rosados con D.O. Campo de Borja suelen ser frescos y aromáticos, por lo que pueden ser una buena opción. El “Borsao Rosado Selección” es un vino con notas de frutos rojos y florales que puede ir muy bien con la trufa negra.
Trufa negra y vino de Cariñena
La denominación de origen Cariñena, también ubicada en la provincia de Zaragoza, es conocida por producir vinos tintos a partir de la uva Cariñena (conocida también como Mazuelo). Estos vinos suelen ser de cuerpo completo y con un sabor especiado intenso.
La uva Cariñena de la que toma su nombre esta denominación de origen, es una variedad autóctona muy valorada en la región, que se utiliza para producir vinos tintos de gran cuerpo y estructura. Estos vinos suelen tener notas de frutos rojos maduros, especias y toques de madera, lo que los hace ideales para el maridaje.
Otra variedad autóctona de la región es la garnacha, que se utiliza para producir vinos tintos suaves y elegantes, con notas de frutos rojos y especias. Los vinos de garnacha suelen ser menos tánicos que los de cariñena, por lo que pueden ser una buena opción para platos de trufa negra fresca más suaves.
En la Denominación de Origen Cariñena, uno de los vinos que se recomienda para maridar con la trufa negra es el vino tinto “Pago de Valcaliente”, un vino de gran cuerpo y sabor intenso que tiene notas de frutos rojos, vainilla y especias. Este vino es elaborado con uvas garnacha, tempranillo y cabernet Sauvignon.
Aunque no es una variedad autóctona de la región, la chardonnay se está cultivando cada vez más en la D.O. Cariñena para producir vinos blancos de alta calidad. Estos vinos suelen tener notas de frutas tropicales y un toque de vainilla debido a su paso por barrica, lo que los hace una buena opción para platos de trufa negra más intensos.
Trufa negra y vino de Pago de Aylés
Por último, tenemos la denominación de origen Vino de Pago de Aylés, ubicada en la provincia de Teruel. Esta zona vitivinícola produce principalmente vinos tintos a partir de la uva Garnacha y Tempranillo. Los vinos de Pago de Aylés son intensos y con cuerpo, con notas de frutas maduras y especias. Son una buena opción para maridar con platos de trufa negra más contundentes.
El “Tinto Pago de Aylés», es un vino elaborado con uvas Garnacha y Syrah que tiene un sabor intenso y concentrado que se equilibra muy bien con los sabores terrosos de la trufa negra. Este vino es ideal para maridar con platos como un risotto o una carne de caza.
Recuerda que, aunque estos vinos pueden maridar muy bien con la trufa negra, la elección del vino dependerá en gran medida del plato en el que se incluya la trufa fresca, así como de los gustos personales de cada comensal. Lo mejor es experimentar con diferentes combinaciones para encontrar la que más te guste. Si eres amante de la gastronomía y del vino, no puedes dejar de probar esta combinación tan deliciosa y sofisticada. ¡Puedes comprar trufa negra fresca en Sentidos Truferos y hacer tus propias combinaciones!